Recuerdo la primera vez que leí a Kapucinski. Fue El Emperador. Empecé con una novela, algo densa, pero brillante en descripción y sensaciones. Tan periodística.
Seguí con numerosos artículos de su época como reportero de guerra. Y como todos los periodistas, sin duda, me alegré enormemente cuando le dieron el Príncipe de Asturias, y lo nomino en privado año tras año para el Nobel.
Nunca llegó este premio, ni llegará ya, supongo.
Kapucinski ha muerto hoy, pope del periodismo y la palabra, gurú de rostros ajenos.
Dejo un par de reflexiones de este gran hombre, que me recuerdan eso que decía el amigo Alfonso Negrón antes de emprender la vuelta al mundo: "Cada cultura tiene un rostro diferente y quiero reflejar todos ellos". Y lo que dice hoy, en medio del periplo: "Los diferentes rostros de cada cultura son el rostro del mismo hombre".
"A mí me interesa la gente, los ciudadanos que no salen en los medios. Si quiere usted hacer un reportaje, tendrá que conocer a las personas que viven la realidad que usted describe: tendrá que vivir con ellas". (kapucinski dixit)
Los 5 sentidos del periodista: Estar- Ver- Oír (o mejor escuchar)- Pensar- Compartir (o contar)
"Nuestra profesión no puede ser ejercida correctamente por nadie que sea un cínico [...]El cinismo es una actitud inhumana, que nos aleja automáticamente de nuestro oficio, al menos si uno lo concibe de forma seria. [...] Quien decide hacer este trabajo y está dispuesto a dejarse la piel en ello, con riesgo y sufrimiento, no puede ser un cínico."
Que descanse en paz, y en un lugar mejor.
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No puedo estar más en desacuerdo con las tesis de este hombre (ni con las de Paco Sánchez). Y es que esos cantos al "hombre de la calle" siempre me han olido a chamusquina. Ese intento de tomar el pulso a la realidad descarnada me suena a personas que admiten estar en un plano superior del que hay que descender para escribir un reportaje. Para no tener que descender al nivel de "esa realidad" lo mejor es no haberse subido a ningúna otra realidad primero. Entreveladamente vemos un punto de partida idéntico al del cínico al que tanto le reprochan su desapego a "la realidad".
ResponderEliminarSobre periodismo me van más las propuestas al estilo de las que Warren Ellis pone en boca de mi querido Spider Jerusalem, como:
"Te sientes miserable, furiosa y cansada. Un humor perfecto para el periodismo."
Llegado el caso de seguir las directrices que proponen las eminencias enunciadas en la reflexión periodística de la Dalloway, ganaremos un montón de esos artículos escritos desde un espíritu bien pagado de si mismo y copiando el estilo (Nuevo Periodismo) que machacan conceptualmente. Un gran ejemplo es de esto es la narrativa del mencionado Paco Sánchez.
Yo, personalmente, es que tengo cosas mejores que hacer que ponerme a buscar en Google algún artículo de Paco Sanchez para que ustedes puedan comparar. Lo que sí les voy a dejar para que puedan contrastar es un artículo clave en los orígenes del Nuevo Periodismo. En concreto uno de Hunter S. Thompson, padre de la tendencia Gonzo setentera, "El Derby de Kentuky es Decadente y Depravado".
A mi me comunica más cosas esta manera de contar la realidad desde un punto de vista que no esconde lo subjetivo ni la parte ficcional de todo relato.
Quizá porque soy un cínico...
Pues sí, Mac, quizá sea porque eres un cínico y la inocencia te resulta incómoda.
ResponderEliminarEl caso es que, Paco Sánchez aparte, creo que Kapucinski tenía una mano especial para los textos, creo también que esa "realidad paralela" te la has sacado de la manga y creo por último que sí, que el humor perfecto para el periodismo es bastante negro, ayer y hoy, y que quedan pocos periodistas que sonrían, ay (quizá porque tú los apuntas con tu rifle...)